jueves, 23 de abril de 2009

Simbad el marino

¿Cómo podría explicaros lo que sentí en aquel instante? Fué como si las puertas del cielo se abrieran ante mí de par en par .Con el corazón lleno de esperanza , corrí sin descanso hacia la brecha de luz ,que cada vez se fué haciendo más y más grande y , cuando por fin llegué frente a ella , mis ojos vieron de nuevo el azul intenso del mar .
Resultó que el agujero de mi salvación se encontraba en la pared de un acantilado
,hata el que trepaban los animales para entrar en la fosa y alimentarse con los cadáveres

1 comentario:

  1. Estás aprendiendo muchas cosas nuevas. Me alegro por tí Rocío.
    Te está quedando muy bien el trabajo, pero ¿no crees que si abusas de un recurso pierde su eficacia? No pongas todo subrayado. Queda mejor si seleccionas alguna palabra.

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